- La Consejería de Fomento y Medio Ambiente efectuará a lo largo de esta semana el censo anual de aves acuáticas invernantes
- En el censo anterior de aves acuáticas invernantes, realizado en Castilla y León en enero del pasado año, se contabilizaron 50.937 ejemplares de 58 especies diferentes en 415 humedales
15 de enero de 2022
Castilla y León |
Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio
Desde el año 1967, la organización Wetlands International promueve y coordina un programa de censos de aves acuáticas invernantes en humedales, que se llevan a cabo anualmente a lo largo del mes de enero, periodo en el que muchas especies de acuáticas se congregan en enclaves concretos, por lo que su recuento es más sencillo y fiable que en otras épocas del año, y que se desarrolla en todos los continentes. Las fechas establecidas para el año 2021 son entre el 9 y el 24 de enero, siendo prioritarios el 15 y 16 de enero.
En Castilla y León, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente coordina y realiza este seguimiento que está enmarcado dentro del Plan de Monitorización del Estado de Conservación de la Biodiversidad en Castilla y León, y en el que participan agentes medioambientales, celadores de Medio Ambiente y técnicos de los Servicios Territoriales de Medio Ambiente, junto con el apoyo de personal técnico de la Fundación del Patrimonio Natural.
Este seguimiento anual permite obtener una imagen fija de cada una de las especies de aves acuáticas a nivel regional y contribuye a revelar la importancia que tienen las diferentes zonas húmedas de la Comunidad para la invernada de aves acuáticas.
El aspecto más relevante de este programa es su capacidad para proporcionar tendencias de poblaciones de aves a largo plazo, mediante la recogida de datos de forma estandarizada: recuentos efectuados con la misma metodología y en los mismos sitios cada año. De esta forma, se dispone de información sobre la evolución de las poblaciones de aves acuáticas y su estado de conservación, teniendo en cuenta que esta información es crucial para su gestión.
Además, los censos de aves acuáticas se han convertido en un instrumento fundamental para el conocimiento y valoración de sus hábitats, los humedales, que son objeto de atención preferente por su fragilidad y singularidad.
Resultados anteriores
Un total de 50.937 aves acuáticas pertenecientes a 58 especies invernaron en los 415 humedales muestreados en el anterior seguimiento realizado durante enero de 2021. Las principales zonas húmedas donde se concentraron más ejemplares por provincia fueron: las lagunas de Villafáfila (Zamora) con 5.824 aves y las lagunas de La Nava, Boada y Pedraza en Tierra de Campos (Palencia) con 4.950 aves; el embalse de Rosarito (Ávila) con 2.951 aves, el tramo de Huerta en el río Tormes (Salamanca) con 2.087 aves, la Reserva Natural de las riberas de Castronuño (Valladolid) con 2.056 aves, la balsa de Santa Cristina (León) con 1.689 aves, el embalse del Ebro (Burgos) con 1.158 aves, el embalse de Torrelara (Segovia) con 339 aves y el embalse de Cuerda del Pozo con 300 aves. El ánade azulón, el ánsar común, la cerceta común, el cormorán grande, la focha común y la gaviota reidora fueron las especies más abundantes con más del 77 % de los ejemplares detectados.
El análisis de la tendencia general de la población invernante de aves acuáticas en la Comunidad es negativo en los últimos años. En el territorio de Castilla y León se concentraban más de 100.000 aves acuáticas invernantes hasta el año 2011, pero estos valores han ido en descenso hasta llegar a menos de 60.000 ejemplares del último censo de 2021. Este fuerte descenso está motivado principalmente por la reducción de la población invernante de ánsar común que cada año acude en menor número a los humedales de la Meseta Norte, debido a que han acortado sus desplazamientos migratorios y actualmente, sus zonas de invernada se localizan en áreas el centro y norte de Europa.
El Plan de Monitorización del Estado de Conservación de la Biodiversidad en Castilla y León
En el marco de la planificación y la gestión de los lugares incluidos en la Red Natura 2000, se viene desarrollando el Plan de Monitorización del Estado de Conservación de la Biodiversidad en Castilla y León que aborda principalmente el seguimiento y evaluación del estado de conservación de los hábitats de interés comunitario y las especies incluidas en el anexo I de la Directiva Aves, anexos II, IV y V de la Directiva Hábitats, el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y en el Catálogo Español de Especies Amenazadas. El número total de especies objeto de seguimiento se sitúa en 323 taxones de fauna en Castilla y León, lo que da idea de la magnitud del programa regional de seguimiento de fauna protegida.
Durante el presente año la Consejería de Fomento y Medio Ambiente tiene previsto realizar con medios propios el censo de los siguientes grupos de especies: aves acuáticas (invernantes y migradoras), ardeidas (garzas y especies afines), aves galliformes (urogallo cantábrico) aves forestales amenazadas (águila imperial ibérica, cigüeña negra, buitre negro y milano real), aves esteparias (avutarda, ganga ibérica y ganga ortega, sisón, aguilucho cenizo y aguilucho pálido), aves rapaces rupícolas (águila perdicera, buitre leonado y alimoche), aves forestales no amenazadas, mesomamíferos carnívoros y oso pardo cantábrico.