La temporada de caza en esta modalidad, que cuenta con un gran arraigo en la Comunidad, se inicia el domingo 15 de agosto y se cierra el 19 de septiembre.
14 de agosto de 2010
Castilla y León |
Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio
La temporada de caza en la modalidad de media veda, que cuenta con un gran arraigo en la Comunidad, se inicia el domingo 15 de agosto y se cierra el 19 de septiembre. Para la tórtola común se retrasa el comienzo de la época hábil al 22 de agosto. El número de días hábiles de la media veda no podrá exceder de 20, no necesariamente consecutivos. Se mantienen las especies cazables, excepto la grajilla (Corvus modelula), que no será cazable durante la temporada que se avecina. Los periodos y días hábiles de caza del resto de especies no sufren cambios, si bien se ajustan al nuevo calendario.
Respecto a la perspectiva de resultados de la especie principal de la campaña, la codorniz, se prevé una temporada buena en las provincias de Burgos, Palencia y León. En el resto del territorio las perspectivas son más desfavorables, siendo las más negativas las del sur de la provincia de Valladolid.
Con motivo del inicio de la temporada de media veda, la Consejería de Medio Ambiente ha dado una serie de consejos a los cazadores, entre los que cabe destacar la conveniencia de suspender la caza entre las 12 y las 17 horas, momento de máximo calor en la que tanto las especies de caza como los perros, elemento fundamental en este aprovechamiento, se encuentran en peor situación. De igual manera, y cuando se detecte la presencia en una zona de pollos de codorniz, se deberá retirar a los perros, con el fin de causar los menores daños posibles a la especie. Este comportamiento refuerza el compromiso del cazador con la especie y es una garantía de su mantenimiento futuro.
En cuanto a las restantes especies, se debe destacar tres aspectos. El primero que debe tener en cuenta el cazador es que la grajilla (Corvus monedula) ha quedado excluida de las especies que pueden ser cazadas en esta temporada cinegética en Castilla y León y, por lo tanto, durante la media veda.
En cuanto a las otras dos especies más destacadas de este periodo, la tórtola y paloma torcaz, se retrasa su apertura respecto de la codorniz. Así la tórtola no podrá cazarse hasta el 22 de agosto y la paloma se retrasa a la misma fecha en la provincia de Salamanca. En cuanto a la tórtola, la expectativa vuelve a ser favorable en Burgos y Palencia, reduciéndose en el resto de la Comunidad. En el caso de la paloma torcaz, especie cada vez más sedentaria y asentada incluso en núcleos urbanos, destaca la provincia de León.
En lo que se refiere a los cupos máximos de ejemplares por cazador y jornada, para aquellas especies en las que exista este limite, se mantienen los de la temporada anterior, es decir 35 codornices y 8 tórtolas, por cazador y dia.
Orden anual de caza
El pasado 10 de junio, el Consejo de Caza de Castilla y León, en el que se encuentran representados todos los sectores implicados en la gestión cinegética de la Comunidad, ha dado hoy el visto bueno a la Orden Anual de Caza para la temporada 2010/2011, en la que se recogen las especies objeto de aprovechamiento, su periodo hábil, así como todas otras aquellas medidas que, en función de las diferentes circunstancias, se considere necesario establecer.
La temporada general de caza menor podrá desarrollarse desde el cuarto domingo de octubre hasta el 31 de enero. No obstante, la Dirección General de Medio Natural podrá autorizar, a petición de la Federación Castellano-Leonesa de Galgos, la caza de la liebre con galgo desde el día 12 de octubre, a aquellas asociaciones pertenecientes a la Federación Castellano-Leonesa de Galgos que se encuentren inscritas durante esta temporada para participar en el Campeonato de España, o de Castilla y León de Galgos y campeonatos provinciales, siempre que dichos galgos tengan pendiente su participación en alguna prueba oficial.
Los periodos hábiles de las especies de caza mayor no sufren variación respecto a la orden actualmente en vigor, excepto el ciervo, gamo y muflón, ya que se adelanta la posibilidad de ser cazados en cacerías colectivas al 21 de septiembre.
Asimismo, el periodo de caza de corzo se limita en el periodo de primavera al 31 de julio. En lo que respecta a las solicitudes de monterías y ganchos, cualquier solicitud de modificación de fecha o mancha de monterías o ganchos autorizados que no se ajusten a las razones contenidas en la Ley de Caza, a todos los efectos se considerará como una nueva solicitud.
Por otro lado, se acordó que en el caso de monterías de menos de 30 puestos y si el total de cazadores que participan no supera los 29, el número de éstas podrá elevarse a dos en el caso de terrenos cinegéticos de al menos 500 hectáreas.
El Consejo de Caza de Castilla y León es un órgano consultivo adscrito a la Consejería de Medio Ambiente con el objetivo de posibilitar la participación de los diferentes colectivos implicados mediante su labor de asesoramiento.
En el Consejo Regional de Caza están representados -además de miembros de las Consejerías de Medio Ambiente, Agricultura y Ganadería y Cultura y Turismo-, los titulares de los cotos privados de caza y de los clubs deportivos, representantes de la Federación de Caza de Castilla y León, de la Federación de Galgos de Castilla y León, de los consejos territoriales de Caza de las nueve provincias de la Comunidad, universidades, organizaciones profesionales agrarias, organizaciones conservacionistas y personas de reconocido prestigio en materia de caza.
Recursos cinegéticos
La caza y la pesca constituyen un importante recurso natural de Castilla y León. Al conjunto de las actividades cinegéticas y piscícolas, la Consejería de Medio Ambiente destina todos los años parte de sus inversiones tanto en la mejora y protección del medio que alberga este recurso natural, como en su gestión. La inversión prevista en 2010 asciende a 8 millones de euros, de los cuales a caza se destinan alrededor de 5,5 millones de euros.
La superficie destinada a aprovechamiento cinegético en Castilla y León es de 8.605.958 hectáreas (un 91,3%25 de la superficie de la comunidad), de las cuales 8.023.884 hectáreas pertenecen a cotos privados repartido en un total de 5.793 cotos privados. El resto, es decir, 572.433 ha son terrenos cinegéticos especiales formados por 10 Reservas Regionales, 4 Cotos Regionales y 8 Zonas de caza Controlada.
En Castilla y León hay 44 especies cazables: 36 de caza menor y 8 de caza mayor. Se capturan cada temporada aproximadamente 1.500.000 piezas de caza menor siendo las principales especies la perdiz, el conejo y la liebre junto con la codorniz (especie migradora cazada en media veda). De caza mayor la cifra es de aproximadamente 27.000 piezas, siendo las especies principales el jabalí, ciervo, el corzo y el rebeco (en Castilla y León se caza el 65 %25 del total de los rebecos abatidos en España).