Saltar al contenido principal.

Escudo de la Junta de Castilla y León; Página de inicio

Comunicación de la Junta de Castilla y León

Redes Sociales

  • X. Abre una nueva ventana
  • Facebook. Abre una nueva ventana
  • Youtube. Abre una nueva ventana
Contenido principal. Saltar al inicio.

A información pública la declaración del Palacio de la Mosquera como Bien de Interés Cultural

  • Compartir

La Junta de Castilla y León ha abierto un periodo de información pública, de un mes, para que cualquier persona pueda alegar cuanto estime conveniente respecto a la declaración del Palacio de la Mosquera o Palacio del Infante Don Luis de Borbón de Arenas de San Pedro como Bien de Interés Cultural, con categoría de Monumento.

9 de agosto de 2011

Castilla y León | Delegación Territorial de Ávila

El Palacio de la Mosquera, que se encuentra situado al sur de la Sierra de Gredos, en un paraje natural de gran valor paisajístico, fue construido por el Infante Don Luis Antonio de Borbón y Farnesio, décimo hijo del Felipe V y hermano de Carlos III.

El propósito del Infante era la construcción de un gran palacio y un jardín botánico, y para ello encargó el proyecto a Ventura Rodríguez. El arquitecto supervisó la realización del proyecto, pero delegó su ejecución en cuatro colaboradores: el arquitecto Mateo Guill, el maestro de obras del Infante Alfonso Regalado, y los hermanos Ignacio y Domingo Tomás. La envergadura del proyecto y la avanzada edad de Don Luis, hicieron que el proyecto nunca llegara a concluirse.

Los ocho años que el Infante vivió en este Palacio fueron la época de mayor esplendor cultural de la villa. El Infante, gran amante del arte, de la historia y de la ciencia y considerado uno de los más importantes mecenas y coleccionistas del reino, contribuyó de forma importante al arte nacional y al desarrollo de Arenas de San Pedro, convocando a viajeros europeos ilustres y a numerosos artistas: compositores como Luigi Boccherini, arquitectos como Ventura Rodríguez y pintores como Goya, quien inmortalizaría en sus cuadros el magnífico entorno de la Sierra de Gredos.

Don Luis reunió en el Palacio de Arenas una rica, original y variada colección de pinturas, estampas, dibujos y esculturas. Amante de la historia y de la ciencia, creó un completo Gabinete de Historia Natural y una espléndida Biblioteca, que sin duda debieron causar gran impresión al visitante de la época.

El edificio, construido entre los años 1780 y 1783, se caracteriza por su disposición neoclásica. Siguiendo el orden característico de la arquitectura palaciega presenta una planta cerrada articulada en torno a un patio interior cuyo centro ocupa una fuente piramidal.

La planta se ordena en cinco crujías paralelas a la fachada principal, siendo la central donde se ubican la escalinata y los patios. A su vez estas crujías se cortan mediante otras perpendiculares, ordenando y dividiendo la planta en estancias cuadriláteras bien proporcionadas, de total regularidad, donde el eje se convierte en el protagonista.

La fachada muestra las huellas evidentes de un edificio inacabado que utiliza materiales característicos de su entorno como el granito gris y los revocos de arena del Tiétar.

Al exterior, el palacio destaca por sus elegantes proporciones, ordenando sus tres niveles con unas líneas horizontales claramente palaciegas. Los torreones que se elevan sobre la cubierta y rematan las esquinas, dotan al palacio de un aspecto escurialense.

Este carácter sobrio y ordenado caracteriza su exterior, donde destaca por su monumentalidad el pórtico. La entrada principal del palacio se realiza a través de este bello pórtico de proporciones clásicas realizado en piedra granítica y concebido como un arco de triunfo formado por tres arcos con seis columnas dóricas y un balcón con balaustrada y que da acceso al zaguán.

El zaguán permite el acceso al espacio de la escalera, espacio cuadrado en doble altura cubierto mediante bóveda y delimitado mediante una arquería perimetral con balcones que se configura por sus elegantes proporciones como una de las piezas fundamentales del palacio.

El palacio limita al oeste con la Casa de Oficios y las caballerizas. La Casa de Oficios, destinada a la servidumbre del Infante, fue construida en mampostería y ladrillo y dividida inicialmente en trece departamentos.

Una parte importante del proyecto la constituían los jardines, cuyo diseño presentaba una tipología cercana a los jardines ornamentales de la Granja, plantados de parterres en «broderie», articulados alrededor de fuentes circulares de tipología muy elaborada, como la fuente de los delfines, en parte conservada.

Vaciado este palacio de todo su contenido entre 1785 y 1796, ocupado por las tropas napoleónicas en 1809 y convertido en seminario menor entre 1868 y 1869, fue vendido por sus herederos y destinado a Seminario hasta 1972, siendo objeto de importantes modificaciones en su distribución interna, hasta su compra en 1988 por el Ayuntamiento de Arenas de San Pedro, que procedió a la rehabilitación y puesta en valor de todo el conjunto.

Atendiendo a la importancia del Palacio de La Mosquera, no sólo desde el punto de vista histórico y arquitectónico, sino también considerando los valores inmateriales vinculados al sitio, la Junta de Castilla y León está tramitando su declaración como Bien de Interés Cultural, con categoría de Monumento.

Teniendo en cuenta la traza originaria de sus elementos más destacados, se define como tal el actual Palacio, la Casa de Oficios y el jardín del Palacio, delimitándose un entorno de protección que comprende las parcelas vinculadas espacial o visualmente al edificio, con el fin de establecer, en torno al inmueble, un contexto territorial que constituye la visual paisajística esencial en la que cualquier intervención que se realice pueda suponer una alteración de las condiciones de percepción del bien o del propio carácter de este espacio.