La cocina de ‘línea fría’ de los tres hospitales de Zamora cumple ocho años

29 de octubre de 2015

Castilla y León | Delegación Territorial de Zamora

El Sistema de Producción Alimentaria en Línea Fría Hospitalaria (LFH) del Complejo Asistencial de Zamora cumple ocho años al frente de un sistema pionero en la Comunidad para la distribución de los menús a los pacientes ingresados. Durante el año pasado fueron elaborados en ‘línea fría’ casi 100.000 comidas, incluidos los desayunos y meriendas –que se preparan en caliente-. Los platos son distribuidos desde esta cocina central a los tres hospitales: Virgen de la Concha  y Hospital Provincial en Zamora y el Hospital de Benavente.

El delegado territorial, Alberto Castro, acompañado por el gerente de Atención Especializada y Primaria, Francisco Montes, ha visitado esta mañana las instalaciones y ha señalado “el buen funcionamiento gracias a los profesionales que están trabajando en esta línea fría para que todas las comidas lleguen a los usuarios en perfectas condiciones y con la máxima garantía alimentaria”.

En todos estos años han visitado las instalaciones profesionales de otros países del mundo como Perú, Francia, México, Alemania, Marruecos y Panamá, así como de otros puntos de España.

Con objeto de cubrir las necesidades de los diferentes estados convalecientes, la cocina central dispone de un servicio de dietética que diseña los menús de los pacientes. De esta manera, las dietas se corresponden a las necesidades individuales (líquida, blanda, semiblanda, para celíacos, diabéticos, de fácil masticación…).

En lo que se refiere al sistema de preparación de los alimentos de ‘línea fría’, la cocina central recoge productos de primera calidad en un muelle de entrada, éstos pasan por un almacén refrigerado –diferente según su naturaleza- y posteriormente son cocinados de una manera tradicional y conservados entre los 5 y 8 grados. La ‘línea fría’ permite conservar la comida entre 5 y 21 días con lo que se amplían las fechas de caducidad.

Finalmente, antes de ser consumidos, los platos se calientan mediante unos modernos carros de termocontacto. Durante este largo viaje alimentario se siguen los más estrictos protocolos de higiene y seguridad.

También, la cocina central dispone de otros equipos innovadores como termoselladoras, abatidores, carros de transporte y retermalización, cubetas y barquetas herméticas desechables, entre otros.