- Isabel Blanco ha anunciado que la Junta de Castilla y León incrementa en 17,2 millones de euros la financiación destinada a los centros residenciales a través de las prestaciones vinculadas
- La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades establece un aumento de un 10,5 % de media para las cuantías máximas que va a llegar a más de 52.000 beneficiarios
- El protocolo firmado con el sector de las residencias de mayores de Castilla y León para avanzar en la implantación del nuevo modelo de atención residencial contempla la formación específica de los profesionales en atención libre de sujeciones
13 de enero de 2023
Castilla y León |
Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades
La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, ha anunciado hoy una subida de más del 10 % en la prestación vinculada al servicio que es la que reciben las personas dependientes para pagar la residencia en la que viven. En concreto, las cuantías máximas se incrementan un 10,5 % de media. De esta manera, la prestación máxima de una persona con grado III alcanza los 1.065 euros, frente a los 715 euros que establece el Estado.
Isabel Blanco ha explicado que esta subida “va a llegar a más de 52.000 beneficiarios de la prestación vinculada y de asistencia personal y conlleva un incremento del gasto de 17,2 millones de euros”, y ha recordado que, en 2022, “la Junta de Castilla y León destinó más de 146 millones de euros en prestaciones vinculadas a servicios y asistente personal”.
La responsable del departamento de Familia e Igualdad de Oportunidades ha hecho este anuncio durante la firma de un protocolo de colaboración entre la Gerencia de Servicios Sociales y la Asociación Castellana y Leonesa de Residencias y Servicios de Atención a los Mayores -sector solidario- (Lares) y la Asociación de Residencias de Tercera Edad en Castilla y León (Acalerte) con el objetivo de desarrollar el nuevo modelo residencial de atención integral centrada en la persona que se está implantando en la Comunidad.
Lares y Acalerte agrupan de forma mayoritaria a las entidades titulares de las residencias de personas mayores en Castilla y León y con ambas la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades mantiene una estrecha colaboración para la mejora de la atención y asistencia que se presta a las personas mayores en residencias y centros de día, colaboración que se ha plasmado en diversos protocolos y convenios firmados con estas entidades y que, según ha destacado Isabel Blanco, “con la firma de este nuevo protocolo se refuerza e intensifica, permitiéndonos seguir trabajando conjuntamente en la implantación del nuevo modelo en toda Castilla y León, lo que redundará en una mejor atención, más personalizada y de calidad para nuestras personas mayores”.
Formación y capacitación de los profesionales
El protocolo recoge un Plan de Formación específica y capacitación práctica en el nuevo modelo de atención centrado en la persona para todos los profesionales implicados, desde los que atienden a los mayores hasta los gerentes y directores de los centros de Lares y Acalerte y de la Gerencia de Servicios Sociales. “Ya se ha formado a casi 1.500 profesionales -715 de atención directa y 709 directores y técnicos-. Gracias al acuerdo hoy rubricado, que tiene una duración de cuatro años con posibles prórrogas anuales, continuaremos con este plan para la formación y capacitación de los profesionales en el nuevo modelo de atención centrada en la persona”, ha explicado la consejera. En concreto, durante 2023 se retomará la formación para el personal de atención directa de los centros y se impartirán un total de 45 cursos de forma presencial, 18 cursos en centros pertenecientes a Lares, dos en cada provincia, y 27 cursos en centros de Acalerte, tres en cada provincia.
Isabel Blanco ha subrayado que “se trata de formación imprescindible para los profesionales, ya que el nuevo modelo de atención integral centrado en la persona, en sus necesidades y preferencias, supone una nueva forma de entender los cuidados de larga duración, con cambios significativos en la organización y funcionamiento de los cuidados residenciales”. Se trata de cambios ambientales y estructurales de los centros residenciales con la creación de unidades de convivencia que replican el tamaño y el ambiente del hogar familiar, de manera que el centro residencial sea una continuidad del hogar y de la vida cotidiana de las personas, así como en el rol de los profesionales. Por este motivo, según recoge el protocolo, también se llevarán a cabo programas formativos concretos para la capacitación práctica de los profesionales de acuerdo con los roles y competencias que establece el nuevo modelo.
Buen ejemplo de esta formación especializada es la formación específica en atención libre de sujeciones “que ya estamos poniendo en marcha en los centros de personas mayores y de personas con discapacidad para que los equipos asistenciales aprendan a cuidar sin sujeciones y a guiarles en este tipo de cuidados”, ha explicado la consejera. Tres fundaciones especializadas en este tipo de cuidados -Cuidado Dignos, Dignitas Vitae y María Wolff- serán las encargadas de llevar a cabo esta formación, cuya primera convocatoria a los centros ya se ha realizado, habiéndose inscrito 409 y estando previsto su inicio próximamente.
Reubicación temporal y lucha contra la soledad no deseada y el aislamiento social
Además de esta ambiciosa apuesta por la formación de los profesionales, el protocolo firmado hoy contempla la colaboración en la reubicación temporal de las personas en situación de dependencia derivada de procesos de cierres de centros y otros motivos de fuerza mayor, por un periodo no superior a tres meses, con el fin de realizar su reubicación definitiva al mismo o a otro centro pactada con la persona y su entorno familiar. Este proceso de información, orientación y reubicación definitiva estará coordinado por la Gerencia provincial de Servicios Sociales correspondiente, con la colaboración de los representantes provinciales de Lares y Acalerte y la dirección de los centros que hayan acogido a los usuarios de forma temporal.
Por otra parte, el convenio prevé la colaboración para la detección y atención de personas en situación de soledad mediante la participación de los centros multiservicios como puntos de encuentro o participantes de la ‘Red Amiga’ recogida en el Plan de acción de Castilla y León contra la soledad no deseada y el aislamiento social. “Los centros que colaboren se coordinarán y facilitarán sus recursos a las personas de su zona de influencia para impulsar su participación en actividades que faciliten su interacción social”, ha matizado Blanco, quien ha recordado que, “con el nuevo modelo, los centros residenciales se convierten en centros multiservicio, abiertos a la sociedad, que aúnan los cuidados en el propio centro y en el domicilio”. Este convenio refuerza este papel, impulsando su conexión a través de las nuevas tecnologías y diversos servicios de apoyo, así como con una red de profesionales volcados en la atención de los más vulnerables, entre las que se encuentran las personas en situaciones de soledad no deseada o de aislamiento social, facilitando apoyo social, recursos y actividades que promuevan el bienestar y el desarrollo de proyectos de vida.
“Con todas estas actuaciones estamos facilitando e impulsando la implantación del nuevo modelo de atención residencial en toda Castilla y León progresivamente en todas las residencias y centros de día de la Gerencia de Servicios Sociales, de manera que todos los centros que se construyan o reformen incorporarán sus requisitos y exigencias”, ha recordado Isabel Blanco, quien ha añadido que “estamos realizando importantes inversiones en este sentido y, gracias a los cerca de 100 millones de euros que recibiremos de los fondos europeos, vamos a poder impulsar de forma contundente este cambio en nuestros centros”.
En esa relación de inversiones figuran la construcción de tres nuevas residencias en Ávila, Salamanca y Zamora, y diversas obras de mejora y remodelación en centros de Burgos, León, Palencia, Segovia, Soria y Valladolid, así como la ampliación de plazas de convalecencia y la reconversión de plazas públicas residenciales de personas válidas en otras para dependientes.
Este modelo de atención se trasladará a todas las residencias y centros de día de la Comunidad a través de la futura Ley reguladora del Modelo Atención Residencial para Cuidados de Larga Duración en Castilla y León que está tramitando la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades con el objetivo de que todas las personas mayores reciban una atención y asistencia de calidad en las residencias y centros de día.